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¿Es peligroso que los perros naden en piscinas con cloro?, Esto dice un estudio
A los perros les encanta jugar en el agua pero, ¿qué tan buena idea es que se metan a la piscina?
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Los perros se han convertido en otro miembro más de la familia por lo que no es raro que en los diferentes centros vacacionales se encuentren disfrutando de unos días de descanso junto a sus dueños.
Y tal vez, entre las cosas que más disfrutan es poder jugar con el agua, sobre todo en aquellos climas en donde el calor puede llegar a sofocarlos. Sin embargo, hay que tener en cuenta las condiciones del agua en la cual se va a meter su mascota y si trae o no alguna consecuencia para su salud.
Peligros que pueden correr las mascotas en el agua
De acuerdo a lo que se registra en el portal 20 minutos, son numerosas las advertencias y precauciones que se deben tomar al llevarlos a un sitio donde puedan pegarse un chapuzón, como ríos, estanques o el océano. Los riesgos en estos entornos pueden incluir intoxicación por algas verdeazuladas, consumo de agua salada, mareas peligrosas y la presencia de garrapatas, pulgas y otros parásitos.
Ante estos peligros, surge la duda de qué si es mejor que sus mascotas se diviertan en una piscina cuya agua ha sido tratada y no en un lugar en donde pueden estar mucho más expuestos. Sin embargo, esta no es una verdad absoluta y es mejor consultar al veterinario antes de tomar el riesgo.
Qué dice la ciencia y los expertos
El cloro se utiliza para desinfectar el agua y eliminar bacterias y microorganismos que podrían causar enfermedades. Como es lógico, los niveles de cloro recomendados están diseñados para garantizar la seguridad del uso humano, incluso cuando se ingiere accidentalmente una pequeña cantidad de agua. Sin embargo, con los perros hay que tener ciertas precauciones
Por lo general, la cantidad de cloro que suele usarse en nuestras piscinas no es tóxico para los perros en esas pequeñas cantidades, pero la exposición prolongada puede irritar su piel, los ojos y las vías respiratorias, especialmente en razas con pelaje sensible o predisposición a alergias.
Por otra parte, si un perro bebe demasiada agua clorada, puede sufrir inflamación del esófago, irritación y vómitos. En el caso de las pastillas y tabletas para las piscinas inflables, es crucial mantenerlas en un lugar seguro fuera del alcance de los perros, de acuerdo a lo que se asegura en el portal en mención.
Según un estudio reciente realizado en Estados Unidos, cuyas conclusiones ha publicado el medio de prensa profesional Diario Veterinario, un equipo de investigadores ha encontrado que ciertas razas de perros podrían tener un mayor riesgo de desarrollar un tipo de cáncer, el carcinoma urotelial o carcinoma de células transicionales (CCT), si tienen mucho contacto con piscinas con cloro.
El estudio sugiere que algunas razas, como los terriers escoceses, los west highland white terrier y los pastores de Shetland, tienen más probabilidades de padecer este tipo de cáncer en la vejiga con el uso de piscinas cloradas.
En conclusión, todo exceso es perjudicial y si piensa salir con su mascota, asegúrese que esta puede resistir el cloro de las piscinas.